El camino hacia la legalización del aborto en Argentina

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Collage of event speakers for Main Photo: Constanza Niscovolos / IPPF/WHR

El 25 de febrero del 2021, el Diálogo Interamericano organizó el evento en línea “El camino hacia la legalización del aborto en Argentina” en colaboración con la Embajada de Argentina en Washington, DC y la Federación Internacional de Planificación Familiar, Región del Hemisferio Occidental (IPPFRHO). Michael Shifter, presidente del Diálogo, ofreció unas palabras de apertura. El evento fue moderado por Giselle Carino, CEO de IPPFRHO, y los panelistas incluyeron a Vilma Ibarra, secretaria legal y técnica de la Presidencia del Gobierno de Argentina; Marta Alanis, fundadora de Católicos por el Derecho a Decidir y miembra de la Campaña Nacional de Asuntos Jurídicos; Ana Cristina González Vélez, cofundadora de La Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres y profesora de Derecho de la Salud en la Universidad de los Andes en Colombia; y Monica de Bolle, investigadora principal del Peterson Institute for International Economics (PIIE) y miembra del Diálogo. El evento también contó con las palabras de clausura de Jorge Argüello, embajador de Argentina en los Estados Unidos. Las panelistas discutieron la estrategia empleada por el movimiento feminista para promover la aprobación de la ley para legalizar el aborto en Argentina, los desafíos que enfrentaron y cómo movilizaron los recursos para producir un resultado favorable.

Ibarra expuso cuatro factores clave para el éxito de la votación de 2020 para legalizar el aborto en Argentina. A diferencia de 2018, esta última campaña para reformar la ley del aborto incluyó el apoyo crucial de un presidente que incluyó en su campaña el tema del aborto, lo que ayudó a influir a legisladores. En segundo lugar, la presencia de mujeres feministas en la administración aseguró que existieran aliadas para mantener la presión desde dentro. La campaña de la sociedad civil también buscó el consenso entre varias facciones políticas, generando una confianza que salvó diferencias ideológicas. Finalmente, una estrategia de no confrontación aseguró al público que la ley no obligaría a las mujeres a ir en contra de sus creencias y explicó, en cambio, que la criminalización continua daría lugar a innumerables muertes por abortos inseguros. Este enfoque desarmó la oposición de la Iglesia Católica y otros grupos religiosos.

Alanis explicó cómo el movimiento de las mujeres comenzó sentando las bases para este éxito reciente en los años 80 con reuniones en todo el país que presionaron por una variedad de objetivos feministas, incluida la despenalización del aborto por motivos de salud pública, derechos humanos y justicia social. En 2015, el surgimiento del movimiento “Ni Una Menos” contra la violencia de género desenfrenada y el asesinato de mujeres y niñas amplió la agenda feminista y fortaleció el apoyo público. Esto coincidió con una infusión de mujeres jóvenes en el movimiento, que aportaron un elemento de energía renovada y urgencia a la causa.

González señaló que en Colombia una decisión de la Corte Constitucional de 2006 permitió el aborto como un derecho fundamental, aunque limitado a tres circunstancias específicas. Por ello, el aborto sigue siendo el único problema de salud en Colombia sujeto a la ley penal. En su continuo impulso por la reforma de la ley de aborto existente, el movimiento de mujeres en Colombia ha promovido un amplio debate en todo el país junto con movilizaciones callejeras. Juntos, estos factores han tenido un impacto significativo en los corazones y las mentes de la población en general, así como en la clase política. Como en Argentina, el icónico pañuelo verde del movimiento “Ni Una Menos” ha llegado a representar en Colombia la demanda de leyes más justas que protejan la salud y los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. González expresó su esperanza de que esta “ola verde” se extienda para movilizar a toda la región.

En cuanto a Brasil, de Bolle argumentó que las políticas autoritarias han tenido un efecto claramente perjudicial sobre los derechos de las mujeres y la autonomía reproductiva. La tasa de mortalidad materna en Brasil es mayor que en cualquier otro país del mundo, y las mujeres negras y de bajos ingresos se ven afectadas de manera desproporcionada. A diferencia de Colombia, de Bolle no ve signos de optimismo de que la situación mejorará en un futuro cercano, especialmente con el desafío adicional que presenta la pandemia de Covid-19.

En general, las panelistas ofrecieron una visión integral del camino de Argentina hacia la legalización del aborto, siendo sinceras sobre los obstáculos y victorias. El Embajador Argüello concluyó que el logro experimentado en Argentina tiene que ver con el futuro: con la determinación de que el trabajo conjunto de autoridades gubernamentales y los actores de la sociedad civil llevará a construir una sociedad más justa, equitativa e inclusiva.

VEA EL EVENTO AQUí (audio original):


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