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A pesar del progreso significativo que se ha hecho para ampliar el acceso a la tecnología educativa en los últimos años, la conectividad con fines educativos, especialmente en áreas urbanas vulnerables y áreas rurales, sigue siendo un desafío. Antes de la pandemia, los países de la región focalizaron sus esfuerzos en conectar las escuelas, pero debido al cierre de las escuelas, la agenda de conectividad se ha expandido para incluir la conexión a internet accesible y estable para alumnos y docentes en sus hogares.
Las lecciones aprendidas en este periodo proveen una oportunidad única para explorar el rol de actores clave y acciones necesarias para asegurar la universalización de la conectividad escolar y crear las condiciones adecuadas para expandir el acceso a internet de alta velocidad con fines educativos en centros educativos y hogares.
Para apoyar esta ambiciosa agenda, el Diálogo Interamericano, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial convocaron un Comité para la Expansión de la Conectividad del Grupo de Trabajo en Tecnología e Innovación, con el objetivo de desarrollar una serie de propuestas sobre cómo, a través de alianzas público-privadas, los países de América Latina y el Caribe (ALC) pueden drásticamente ampliar la conectividad al internet (en escuelas y hogares) para fines educativos. El Comité se reunió por primera vez el 1 de septiembre para dar comienzo a este proceso. En su primera reunión, se discutieron los desafíos estratégicos para la agenda de conectividad educativa en la región, a través de la experiencia de varios países y actores clave en el sector.
El desafío de lograr la conectividad significativa con fines educativos es multidimensional: La conexión debe ser de suficiente calidad para permitir un uso relevante desde el punto de vista educativo, y debe estar acompañada del acceso a dispositivos y plataformas de contenidos.
La expansión de las redes que permiten la conectividad debe estar acompañada por medidas que la hagan asequible para todos: Actualmente, solamente 11 de los 21 países en la región alcanzan la meta de asequibilidad establecida por la Alliance for Affordable Internet (A4AI) y aceptada por la ONU.
La agenda de conectividad educativa no puede ser un ámbito autónomo: Debe ser una parte integral de una agenda multisectorial para el desarrollo digital a nivel nacional.
Las alianzas público-privadas son clave para avanzar en esta estrategia: La coordinación con el sector privado ha tenido un rol central en los esquemas de financiamiento para la rápida expansión – y de bajo costo – de la cobertura regional en el contexto de pandemia, por lo tanto, es importante seguir potenciando estas colaboraciones a futuro.
Las estrategias de conectividad deben reconocer y responder a la diversidad de situaciones que viven los hogares y las escuelas de la región: Estas estrategias diferenciadas para la conectividad deben tomar en cuenta diversas situaciones socioeconómicas (zonas urbanas o zonas rurales, o los niveles de ingreso en una región tan desigual) y el uso pedagógico de un futuro modelo híbrido.
El Programa de Educación agradece a la Fundación de AT&T, Coursera, Facebook, Microsoft, Pearson, SBA Communications Corporation, Telecom y Viasat por su generoso apoyo en la realización de este informe.
Este informe evalúa el éxito del Fondo de Innovación 100K para potenciar la colaboración en educación superior y el intercambio académico en las Américas.
En este informe los miembros del Grupo de Trabajo de Tecnología e Innovación en la Educación hacen un llamado a profundizar los esfuerzos innovadores que se han observado durante este período tan difícil y convertirlos en estrategias transformadoras a largo plazo.
Este llamado a la acción es el resultado de una iniciativa conjunta de líderes de los sectores público y privado, como así también de múltiples actores de la sociedad civil que han respondido a la convocatoria del Diálogo Interamericano a un Grupo de Trabajo sobre Conectividad Educativa en asociación con el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial.
