En julio, el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, anunció la finalización de un estudio de factibilidad en conjunto con China sobre un posible tratado de libre comercio (TLC) bilateral entre los dos países.
El presidente de Brasil Lula da Silva, anunció triunfantemente que él y su homólogo turco habían persuadido a Irán para cambiar una gran parte de su programa de enriquecimiento de uranio al exterior. Washington, sin embargo, no aplaudió.